En ciega simbiosis se fundió en tus ojos
mirando la suerte donde había llanto
izó cada vela
aun en el naufragio
sopló cuando el viento
se volvió callado
hizo en cada isla un rincón
y el canto
unas veces río y otras remanso
se mintió en el fondo del silencio
charco
de ese amor rendido
que hoy rueda el destino
negándose errado
No desvelos sino desvelar te deseo...
ResponderEliminarUn fuerte abrazo
Esos amores que van y vienen, son los que màs duelen, pero quedan guardados para siempre. Bello e intenso. Abrazos.
ResponderEliminarAsombradita me tienes, felizmente asombrada porque estás publicando tan de seguido que con mi complicada vida, se me sean pasando tus escritos.
ResponderEliminarNiña, estoy espesita, pero no te cojo.
Mil besos de todos los colores
Sherezade